domingo, 30 de noviembre de 2008

¿Cómo detectar un anuncio sexista?

“(…) la mujer tiene destino propio,(…) sus primeros deberes naturales son para consigo misma, no relativos y dependientes de la entidad moral de la familia que en su día podrá constituir o no constituir;(…) su felicidad y dignidad personal tienen que ser el fin esencial de la cultura”.

EMILIA PARDO BAZÁN

Se acercan las navidades y ya andan bombardeándonos con anuncios para que compremos. Porque hay que regalar y ser felices y comer perdices y porque ésta es la época del año (la única, parece ser) en la que tenemos que demostrar amor por el prójimo (comprando, claro).
Por eso quería dejaros por aquí una guía pequeñita que os puede ayudar a detectar anuncios sexistas. Porque ver la realidad con ojos críticos sí cambia las cosas.

De forma general, anuncios sexistas son aquellos que:
o Utilizan un lenguaje en el que las mujeres no aparecen explicitadas y quedan invisibilizadas bajo el falso genérico masculino, como hombre, hijo, los, chicos, niño, etc., o también los que se dirigen en femenino exclusivamente a las mujeres, aunque el producto o el mensaje puede ser tanto para hombres como para mujeres.
o Cuyos mensajes, no sólo excluyen sino que muchas veces agreden a las mujeres. En este sentido, son totalmente sexistas eslóganes como: “es cosa de hombres”.
o En los que las mujeres son tratadas como seres dependientes con respecto a los hombres: los hombres toman las decisiones.
o Transmiten la idea de que las mujeres no trabajan y son mantenidas por sus padres, novios o maridos.
o Identifican a las mujeres como madres o amas de casa solamente.
o Transmiten la idea de que las tareas domésticas (limpieza, cocina, cuidado de personas) son tareas casi exclusivas de las mujeres y que su realización satisfactoria es la que hace que sean valoradas socialmente.
o Que parodian y/o niegan el trabajo que las mujeres realizan en el hogar.
o En los que las imágenes que se transmiten son solo las de las mujeres “femeninas”, “dulces” y “cariñosas” cuyo objetivo vital es crear un ambiente agradable en el hogar; al igual que los anuncios en los que las mujeres aparecen como pesadas, envidiosas, mandonas o cotillas (cualidades y defectos que aparecen como exclusivos de las mujeres).
o En los que las mujeres aparecen como meros objetos eróticos y sexuales, en la medida en que cosifican a las personas.

¿Se os ocurre algún ejemplo?

viernes, 28 de noviembre de 2008

Mujeres en el mundo

LA VIDA DE UNA MUJER EN ÁFRICA (Extracto de EL PAÍS, 11/02/01 )

Imaginemos la vida de una mujer en África. Se levanta por la mañana y desayuna con sus tres hijos. Uno está ya condenado a morir en plena infancia. Su marido trabaja a 300 kilómetros de distancia, vuelve a casa dos veces al año y, mientras tanto, se acuesta con otras mujeres. Pone en peligro su vida cada vez que tiene una relación sexual. Cuando va a trabajar pasa por delante de una casa en la que vive una adolescente que cuida de sus hermanos pequeños, sin ninguna fuente de ingresos. En otra casa, cuando la mujer le pidió a su marido que usara un condón, éste la llamó puta, le dio una paliza y la arrojó a la calle. Más allá yace un hombre desesperadamente enfermo, sin acceso a un médico, una clínica, medicinas, alimentos ni mantas, ni siquiera una palabra amable. En el trabajo come con sus colegas, y uno de cada tres ya está mortalmente enfermo. Habla en voz baja sobre una amiga enferma a la que los vecinos mataron a pedradas. Su tiempo libre está ocupado por los funerales a los que asiste todos los sábados. Se va a la cama con el temor de que la gente de su edad no llegue a los 40 años. Todos actúan como si no pasara nada: ella, sus vecinos y sus dirigentes, tanto políticos como populares.

JOHANNA McGEARY

martes, 25 de noviembre de 2008

25 Nov: El silencio nos hace cómplices

El número de mujeres muertas a manos de sus parejas sigue siendo alarmante. En lo que llevamos de año ya han muerto 58 mujeres a manos de sus parejas o exparejas. Estas cifras no son más que un indicador de la violencia machista que miles de mujeres tenemos que sufrir cada día. En los últimos años, gracias a la presión del movimiento de mujeres, se han adoptado importantes medidas jurídicas y administrativas para luchar contra esta lacra social. Pero no son suficientes. Se necesita la movilización general de la sociedad para conseguir acabar con un fenómeno complejo y profundamente arraigado en nuestra tradición.
Digámoslo claramente, la violencia contra las mujeres es una violación de los derechos humanos y las libertades fundamentales y el mayor mecanismo de control que los distintos poderes han utilizado a lo largo de la historia para “ponernos en nuestro sitio”, imponiendo a la mujer una situación de subordinación respecto al hombre; es la persistencia del funcionamiento patriarcal enquistado en nuestra sociedad y en nuestras costumbres.
Muchos son los factores que mantienen la violencia contra las mujeres, el poder político y religioso o la estructura social y económica, que han sido determinantes para invisibilizar esa violencia encubriéndola, justificándola y dándole una apariencia de naturalidad que no tiene.
El día de hoy no solo debe servir para pedir más recursos de todas las administraciones para acabar con uno de los problemas más graves que asola nuestra sociedad. Debe crear también un clima de tolerancia cero hacia la violencia machista que haga sentirse apoyadas a las víctimas a la hora de denunciar y deje claro al agresor nuestra más rotunda condena ante cualquier posible abuso o maltrato.
En esta lucha, los hombres tenéis una especial responsabilidad para contribuir a este cambio de actitudes. La violencia de género es un fenómeno social que sufren las mujeres, pero que ejercen algunos hombres en nombre de una supuesta superioridad masculina. La responsabilidad individual es de los maltratadores, pero acabar con el machismo es algo que tenemos que hacer entre todas y todos.
Uno de los principios fundamentales del machismo es haceros creer que solo hay una forma de ser hombre. La mayoría de los hombres, sin embargo, no podéis seguir permitiendo que se os confunda con quienes, en vuestro nombre, ejercen o toleran la violencia contra las mujeres porque no están dispuestos a reconocerlas como iguales. Tenemos que manifestarnos personal y públicamente. Todas y todos.
Por eso debemos participar del día de hoy. Debemos hacer un gesto público para llamar la atención a otros hombres y mujeres y pedirles que se sumen a las movilizaciones contra la violencia hacia las mujeres.
Es necesario que la sociedad vea la esta violencia como un crimen aberrante contra la mitad de la población. Es preciso desde la sociedad, la escuela, la familia, los medios de comunicación, transmitir valores de respeto hacia la mujer, valores de igualdad, erradicando cualquier atisbo de sexismo, de utilización de la mujer como objeto. Ha de ser por tanto una labor de todos y de todas en la que debemos implicarnos.

Es urgente decir BASTA, porque el silencio nos hace cómplices.

domingo, 23 de noviembre de 2008

Lo que no se nombra no existe II

Con motivo del anterior hilo, una lectora ha planteado una serie de cuestiones de gran interés; he preferido responder a su comentario con una nueva entrada con la que espero darle un poco más de profundidad al tema del uso sexista del lenguaje. Por supuesto, se me va a volver a quedar corta la entrada, hay mucho que decir sobre este tema y suele generar mucha polémica.

Dice Lola Marín Moreno en su artículo "El Uso Sexista del Lenguaje" que
el lenguaje es una herramienta que puede – y debe – ser usada al gusto de sus hablantes. Con ello quiero decir que yo parto de la idea de que el lenguaje en sí mismo no es sexista, pero sí que lo es el uso que hacemos de él.
Si, en principio, hay en eso acuerdo, lo que debemos aprender es a detectar los usos sexistas del lenguaje, para corregirlos y, por supuesto, evitarlos.
Este no es un tema nuevo pero sorprendentemente sí que en ocasiones nos sentimos obligadas a justificar el porqué de su pertinencia. No es momento para explicar ahora el origen del androcentrismo del lenguaje en nuestra cultura puesto que eso supondría remontarnos a los orígenes míticos de la dominación de la mujer por parte del hombre. Lo que pretendemos es constatar cómo es en el lenguaje donde se perciben con nitidez algunas de las pautas sociales que han contribuido a la dominación histórica de la mujer por parte del hombre. Esas pautas actúan en el niño o la niña desde que tiene uso de razón, y se convierten en fundamentales cuando se aprende a leer. Pero esa constatación ha de llevarnos a una toma de conciencia que nos permita cambiar el estado de las cosas, porque ese cambio no es sólo posible, sino también necesario.
[...] Por otra parte es cierto que la condición de las mujeres va cambiando, lentamente, pero ese cambio se está produciendo. En este contexto el lenguaje como hemos visto tiene una función decisiva puesto que actúa a la vez como modelo y como reflejo, es decir, refleja la realidad social en un determinado momento a la vez que, al ser susceptible de cambio, al ser un ente vivo, va creando nuevas formas en virtud de las necesidades o deseos de sus hablantes. Una vez que se asientan estos cambios, las futuras generaciones aprenderán a través de la lengua nuevas formas de percibir la realidad a la que adecuarán sus comportamientos.
No se trata de inventar otro lenguaje diferente, ni de maquillarlo para que satisfaga a las feministas, como parece ser que se pretende con lo que se ha llamado lenguaje políticamente correcto. [...] Lo que queremos es usar la lengua para nombrar una realidad que no nos excluya.
[...] Antes de proseguir es necesario saber de qué hablamos exactamente. Es decir, para intentar corregir el sexismo del lenguaje será necesario aprender a detectarlo. Para ello resulta muy útil, en algunas ocasiones, la llamada regla de inversión. Consiste en cambiar en un enunciado el término correspondiente al varón por el de la mujer. Si el resultado modifica en lo sustancial el contenido del enunciado o cuando menos resulta chocante y extraño, entonces podremos hablar de sexismo lingüístico y no cultural. Por ejemplo, si decimos “Sólo los alumnos podrán utilizar las instalaciones deportivas del centro” a nadie le chocará. Pero un enunciado como “Sólo las alumnas podrán utilizar las instalaciones deportivas del centro” levantará más de una queja. Como veremos, nuestro idioma posee los mecanismos necesarios para evitar que esto suceda, diciendo simplemente “Sólo el alumnado podrá utilizar las instalaciones deportivas del centro”.


Tendremos un "Lo que no se nombra no existe III", por ahora no quiero cansaros ;)

viernes, 21 de noviembre de 2008

Lo que no se nombra no existe

“ En un mundo donde el lenguaje y el nombrar las cosas son poder, el silencio es opresión y violencia”.
Adrianne Rich

LO QUE NO SE NOMBRA NO EXISTE.
Ésta es una idea que se repite constantemente en los estudios de la sociolingüística y en la que todas las personas expertas están de acuerdo. El lenguaje es una representación del mundo y lo que no se nombra, no existe. Así, hay guerras de las que se deja de hablar y automáticamente parece que el problema desaparece ¿qué sabemos hoy en día de Somalia? ¿nos preocupa? No, porque ya no lo nombramos ni lo oímos; deja de ser un problema.
Y esto que parece sencillo y evidente para cualquiera, se torna un problema, en el problema, el uso sexista del lenguaje. Y la cuestión es que el lenguuaje debería evolucionar porque:

•Aparecen nuevas realidades que exigen nuevos términos.
•Una lengua que no evoluciona es una lengua muerta.
•El lenguaje representa el mundo en que vivimos.
•La incorporación de las mujeres al ámbito público exige una evolución del lenguaje.

No obstante, los/las que intentamos coeducar (locos y locas de remate), nos topamos constantemente con la reticencia de compañeros y compañeras sobre el tema. Parece que duele decir "alumnado" en lugar de alumnos o "profesorado" antes que profesores. Y ya véis que no he necesitado repetir términos, ni utilizar la maldita arroba ni mucho menos, para integrar en un sólo término a los dos sexos.
Pero cuesta, cuesta mucho que la gente deje de pensar que éste no es un tema importante, que hay problemas mucho mayores de los que las feministas (esas marimachos quema-sujetadores que odian a los hombres) deberían ocuparse. Y pienso que no es cierto. Que este es el TEMA, el primero, porque el lenguajes es reflejo de la sociedad, y si el lenguaje no cambia es porque la sociedad no cambia. Porque, por descontado que el lenguaje no es sexista. Seguimos siendo sexistas nosotros. Y nosotras. Y los que se niegan a incluir pequeños cambios en su modo de hablar aducen siempre las mismas razones peregrinas, tópicos que una se cansa de discutir...

"El uso del masculino genérico es una norma y el castellano es así.”
•El castellano es una lengua viva, no se puede inmovilizar. De hecho, el español no siempre fue “así”, si leemos documentos medievales, veremos como no usaban el masculino genérico, sino que usaban los dos géneros.
•El lenguaje transmite ideología. Esta afirmación está totalmente aceptada por cualquier estudioso o estudiosa de la lengua, de hecho, existen palabras “políticamente correctas” y otras que no lo son; la forma en que hablamos y escribimos dice mucho de quien lo hace, y se transmite ideología, por lo tanto, quien crea realmente en la igualdad de oportunidades para mujeres y varones no debería tener ningún problema en transmitir esa idea por medio de un lenguaje no sexista.
•El español tiene variación genérica. Si decimos que el castellano es un idioma muy rico, y si este idioma distingue entre femenino y masculino, no veo por qué no voy a usar en toda su extensión el género femenino y no empobrecer la expresión usando sólo un género.
•Nuestro lenguaje configura nuestra visión del mundo. Cuando empiezas a usar un lenguaje no sexista, te das cuenta inmediatamente de quién no lo usa, la mirada te cambia y ya no hay vuelta atrás. Cuando alguien te escucha usando un lenguaje no sexista, se da cuenta de la presencia de las mujeres, se le hacen presentes y eso es importante.

“El lenguaje no sexista va contra la economía del lenguaje.”
•¿Es la economía un criterio prioritario en el uso del lenguaje? Si realmente es la economía un criterio prioritario, no entiendo por qué los “puristas” del lenguaje no aceptan el lenguaje usado en los mensajes de móviles, porque es un lenguaje que comunica, que se entiende y más económico no puede ser, no hay una sola repetición de nada, es lo más esquemático y produce mensajes. Teniendo en cuenta la economía, el lenguaje no sexista a veces es más económico que el sexista, ver el ejemplo de “tiene dos hijos”, que en lenguaje sexista es equívoco, y da lugar a aclaraciones que van en contra de la economía, cuando lo más rápido e inequívoco sería: “Tiene un hijo y una hija”. Tiremos el lenguaje literario, que es el mayor despilfarro económico, el uso de tantas palabras sólo con fines estéticos no debería estar aprobado por quienes tienen tanto amor por la economía.

“ El estilo de redacción es farragoso y horrible.”
•Aprendizaje necesario. Como todo, es necesario aprender a usar el lenguaje , lo mismo hay que hacer con el lenguaje informático y nadie se rasgó las vestiduras por decir “software”, “ratón” y demás términos. Cuando se aprende a usar el lenguaje no sexista, su uso se convierte en natural.
•Es curioso que con el lenguaje no sexista haya esa preocupación por el estilo en los escritos y no lo haya en todas las circunstancias, eso da qué pensar, no todas las personas que dicen que es un estilo horrible saben escribir bien y con estilo todo tipo de documentos, entonces ¿por qué no se preocupan de todos sus escritos, no sólo del lenguaje no sexista?

La @ es una horterada, las barras un incordio, el –os,-as una herejía gramatical y los niños y las niñas es duplicar términos”
•La @ es una opción para escritos personales. La arroba no está aprobada como signo gráfico del castellano escrito, por eso está bien usarla para escritos personales o escritos internos, no es correcta para una publicación.
•Las barras y el –os,-as es práctico para formularios y cuestionarios. Al fin y al cabo, el lenguaje de los cuestionarios y formularios ya es bastante hereje con el lenguaje, qué más da usar esos símbolos.
•No existe duplicación cuando los términos no son iguales: “rojo, azul,…” Alguna gente argumenta que decir “las niñas y los niños” es duplicar términos, que es decir lo mismo pero más largo que si dijéramos “niños” como genérico; pero nunca existe duplicación si las realidades a las que nos referimos no son iguales y en este caso no lo son, igual que ocurre cuando en vez de usar la palabra genérica “colores”, decimos los colores concretos, no hay duplicidad, porque las realidades no son las mismas.
El uso de un lenguaje que representa a las mujeres y a los hombres y que nombra sus experiencias es un lenguaje sensato, porque…
 NO OCULTA
 NO SUBORDINA
 NO INFRAVALORA
 NO EXCLUYE
 NO QUITA LA PALABRA A NADIE

Algunos fragmentos de esta entrada pertenecen a Marian Moreno Llaneza, asesora de Coeducación del Centro del Profesorado y de Recursos de Avilés. Comunicación presentada en el marco del curso “¿Dónde están las niñas? La perspectiva de género en la educación para la salud y el deporte”. Octubre, 2004.


Pienso dar muchísima guerra con este tema. Espero que Lola Marín o Yolanda Toral me echen una mano cuando tengan tiempo, porque de esto saben infinítamente más que yo, y ya han escrito sobre esto (y mejor).

lunes, 17 de noviembre de 2008

El sacrificio de una geisha

Seguro que muchos y muchas ya habéis visto esta presentación, no obstante no está de más que la recordemos, porque esta es la realidad en la que vivimos y como siempre les digo a mis alumnos y alumnas, conocer el mundo en el que vivimos es la única forma de poder cambiarlo.


Cuando muchos compañeros me han dicho que coeducar no es importante, siempre me han venido a la cabeza imágenes como esta:


El sacrificio de una geisha
View SlideShare presentation or Upload your own.

viernes, 14 de noviembre de 2008

Empezando por el principio...

Pues me vais a perdonar la clase (deformación profesional), pero creo que debemos empezar a plantear qué significan ciertas cosas, porque debemos saber de qué hablamos cuando decimos sexo, género, roles de género, androcentrismo..., así tendremos un glosario común, lo que facilitará la comprensión de los distintos textos que cuelgue.

COEDUCAR: educar a chicas y chicos al margen del género femenino o masculino, es decir, educarles partiendo del hecho de su diferencia de sexo, pero sin tener en cuenta los roles que se les exige cumplir desde una sociedad sexista, por ser de uno u otro sexo. No se debe confundir con “escuela mixta”, puesto que la experiencia nos dice que no basta con juntar en el mismo espacio a chicas y chicos para hablar de Coeducación; es más, la escuela mixta provocó que los modelos reinantes fueran los androcéntricos, excluyendo la cultura de las mujeres del currículo y de las formas de actuar; así las chicas, durante años, han tenido que adaptarse a una escuela con estructuras patriarcales y perspectiva androcéntrica.

SEXO: carácter de los seres orgánicos por el cual pueden ser machos o hembras. Es un término biológico.

GÉNERO: construcción cultural según la cual se asigna a las personas determinados roles, ocupaciones o valores por haber nacido mujeres o varones. Se habla de género femenino y masculino. Es un término cultural.

ROLES DE GÉNERO: comportamientos que se atribuyen a mujeres o a varones y que llegan a considerarse como naturales, como propios de los sexos, incluso llega a pensarse que vienen determinados genéticamente.

ANDROCENTRISMO: enfoque de un estudio, análisis o investigación desde la perspectiva masculina únicamente.

PATRIARCADO: Toma de poder histórica por parte de los hombres sobre las mujeres: sometimiento de las mujeres, represión sexual femenina, ...

FEMINISMO: Movimiento social y político que se inicia formalmente a finales del S. XVIII y que supone la toma de conciencia de las mujeres, como grupo o colectivo humano, de la opresión de que han sido y son objeto, y que las mueve a la acción para conseguir la igualdad de oportunidades entre los sexos

Si tenéis alguna duda, ya sabéis... silbad ;)

martes, 11 de noviembre de 2008

Soy feminista

Me preguntan hoy mis compañeros de turno de coches, que por qué las feministas no dejamos de emplear ese término para autonombrarnos, que es feo y radical y que debemos superar eso. Y me dicen, por otro lado, compañeras de trabajo, a las que quiero y respeto porque son mujeres inteligentes, que ellas no son feministas ni "ná de eso" , que ellas pasan, que "hombres y mujeres iguales pero que eso de feminista es mu radical", que ellas no van quemando sujetadores por ahí y que no todos los hombres son malos...

El feminismo es un conjunto de teorías sociales y prácticas políticas en abierta crítica de relaciones sociales históricas, pasadas y presentes, motivadas principalmente por la experiencia femenina. En general, los feminismos realizan una crítica a la desigualdad social entre mujeres y hombres, y proclaman la promoción de los derechos de las mujeres. Las teorías feministas cuestionan la relación entre sexo, sexualidad y el poder social, político y económico.

Creo que es necesario que empecemos a llamar las cosas por su nombre y que superemos visiones falsas o sesgadas de un movimiento que no demoniza a una parte de la sociedad, ni mucho menos, y que ha luchado y lucha por que la mitad de la población tenga los mismos derechos y deberes que la otra mitad.

Como este tema es importante y tiene mucho que decir..., mañana más ;)

lunes, 10 de noviembre de 2008

Anuncios que me cabrean

¿Qué por qué tenemos que coeducar? Finalmente una imagen siempre vale más que mil palabras...

¿Aquí tú eres la Queen?

¿Por qué he elegido este nombre para el blog?

Ese es el nombre de una guía que les he preparado a mis alumnas y alumnos de secundaria con motivo del próximo 25 NOV. En ella, en la que recopilo muchas de las cosas que he leido y estudiado acerca de la violencia de género (y en la que incorporo algunas cosas de creación propia), trato de ofrecerles un instrumento sencillo e inmediato que les permita conocer qué es la violencia de género y como detectarla en sus primeras relaciones de pareja.
La formación y la denuncia es el único mecanismo de defensa del que disponemos, y los que intentamos transmitir (conocimiento pero sobre todo valores), debemos esforzarnos, creo, por dotar de recursos para que nuestras alumnas sepan qué hacer ante una situación de maltrato.
Aquí os dejo un estracto:

"La idea del amor romántico, la idea del príncipe azul, puede hacer que no veas lo que está pasando en tu relación. Muchas veces pensamos que aunque nuestro chico nos trate mal, también hay momentos en que se muestra cariñoso y que esos pocos momentos buenos compensan los malos; esto es porque la idea del príncipe azul hace que sólo veamos las cosas buenas que hay en él y tratemos de disimular las malas ante los demás y ante nosotras mismas.
Se supone que ese príncipe azul nos salvará y nos protegerá, pero no podemos depender de otra persona para sentirnos seguras. Nosotras tenemos que ser autónomas para poder romper las relaciones que no nos convienen porque hay chicos que sí nos tratarán como merecemos, pero sobre todo porque no podemos considerar a nuestra pareja como la única meta de nuestra vida."

El comienzo...

Comienzo este proyecto aún sin forma. El objetivo, que mi alumnado en primer lugar, mis compañeras y compañeros de fatiga (los que intentamos coeducar) y toda persona que lo desee me ayude a crear una realidad velada por unas gafas violeta.
Gracias a todos y a todas por adelantado. Nos deseo suerte. Estoy muy ilusionada...